miércoles, marzo 07, 2007

Capitulo 3

Que sueño mas raro el de anoche…nunca tuve un sueño tan lucido, con tantos detalles que pueda recordar, tan vivo. Puedo sentir aun el aroma del lugar. Quién me explica todo esto? Encuentra la respuesta dentro de ti, me dijeron. Lo voy a intentar.

Primero una ducha tibia…ya está. Ahora me voy a sentar entre aquellos almohadones en el centro de la habitación. Luz tenue. Música suave. Sahumerio de sándalo. Cierro los ojos y respiro pausadamente, profundo, con ritmo. Relajo cada uno de mis músculos y cada parte del cuerpo. Siempre llego hasta este punto, todo muy lindo y muy relajado pero no pasa nada más. Igualmente voy a preguntar: cuál es el significado del sueño de anoche?..Y en ese momento todo comenzó a girar. No había pensamientos perturbadores, no había pensamientos…Y allí estaba nuevamente. Ante mi el enano luciérnaga, era como un gnomo resplandeciente. Me dijo:

-Abro mis manos y puedo hacer que de ellas brote luz-y mientras esto decía podía ver chisporrotear hacia todas direcciones fulgores de rarísimos colores, estaban vivos, inconcebibles en el mundo cotidiano. Su mano también resplandecía-El color que elija-continuó- Puedo hacerla crecer y enviarla al sitio que escoja. Puedo brillar y ensanchar mis limites “ad infinitum”. Puedo controlar el viento y las mareas y superar cualquier velocidad. Por qué es que tanto cuestionas? Nunca se recuerdan. Nunca recuerdan nada. Me encuentro una y otra vez con seres como tu para mostrarles que sí pueden. Despierta de una vez! Después se sorprenden de lo que fueron capaces y no pueden llegar a comprender que solo les faltó imaginación. Llegó el momento, ésta es la hora. Siempre lo olvidan. Una y otra vez les digo Ey! Una y otra vez los oídos taponando sutilezas. Sí puedes, si puedes. Abre ahora tus manos y entrega poder…

Entonces descubrí que con solo desearlo partían desde mis manos cataratitas de colores. Y él como si nada continuó:

-Es que sí puedes. A veces solo falta que te diga que es posible. Después de un tiempo que en sueños te enseño los portentos, al despertar no lo recuerdas. Pero es una amnesia que produces para no responsabilizarte de la magia, de tu vida, de tus creaciones. Y cuando el miedo golpea tu puerta quieres recordar y llamas. Me convocas y otra vez aquí estoy. Me esparzo por todo el universo siempre transmutando.

En ese instante abrí los ojos, tumbado. Me incorporé como pude. Un hambre voraz se encargó de vaciar la heladerita. Sin comentarios…y todo bien.

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